
La imitación, forma sincera de admiración
En los 60, existían en EE.UU. casas de moda que realizaban réplicas autorizadas de diseños Chanel, como bien podría ser el caso de este conjunto conformado por chaqueta y vestido. Una vez que se realizaba el pedido, los patrones originales, la tela, botones e incluso etiquetas eran enviadas desde París. Era precisamente una de estas piezas la que Jackie Kennedy llevaba el día del asesinato de John F. Kennedy.
Esta práctica, en realidad, surge durante la Gran Depresión, cuando Chanel responde a las dificultades con una exposición benéfica, en la que permitía que los modelos exhibidos fueran reproducidos.

La reproducción de Chanel autorizada que llevaba la primera dama Jackie Kennedy durante el asesinato del presite John F. Kennedy está a día de hoy custodiada por los Archivos Nacionales de Estados Unidos, como un objeto de gran relevancia histórica. El conjunto, propiedad de la familia Kennedy fue donado a los Archivos Nacionales en el año 2003, previa firma de un contrato que recoge que este no puede ser expuesto hasta, al menos, el año 2103, momento en que la familia renegociará las condiciones del contrato.

Para Coco Chanel, la costura no es un oficio sino un arte, y dejó un legado impresionante que lo demuestra. Chanel falleció en 1971, en su suite del hotel Ritz, y es pocos días después que se presenta su última colección, calificada como una de las más deslumbrantes de la moda contemporánea.
La alta costura de la casa Chanel pasa a ser dirigida por Karl Lagerfeld en 1983, quien gracias a su capacidad para anticiparse a los gustos y preferencias de las mujeres en la moda, y su amor por el refinamiento y el lujo, lo consagraron como el perfecto sucesor de Coco Chanel.








